De lo digital a lo transaccional: el nuevo reto para la banca en América Latina

Lima, 16 de mayo de 2025.- Durante más de una década, la transformación digital ha sido la gran apuesta del sector financiero en América Latina. Aplicaciones móviles renovadas, portales más intuitivos y procesos automatizados fueron presentados como símbolos de modernidad. Sin embargo, este cambio ha sido, en muchos casos, más estético que estructural.
“Lo que está en juego no es solo cómo se ve una app, sino cómo se ejecuta una transacción”, señala Pablo Pereyra Portugal, Chief Revenue Officer de 2innovate. Aunque las interfaces resulten amigables, el verdadero desafío radica en la capacidad operativa: mover dinero de forma fluida, interoperable y en tiempo real. Y eso requiere mucho más que una renovación visual.
Actualmente, más del 60% de las transacciones financieras en la región se procesan sobre sistemas centralizados que datan de hace décadas. Un estudio de Accenture revela que el 59% de las instituciones financieras aún dependen de arquitecturas legadas, lo que limita su capacidad de adaptación ante la evolución del mercado y de los usuarios.
El usuario digital ya no compara su banco con otros bancos, sino con la velocidad y experiencia que ofrecen apps como Ualá, Mercado Pago o WhatsApp. Frente a esta nueva vara, muchas instituciones siguen invirtiendo en diseño, sin abordar los cimientos tecnológicos que permitan una experiencia realmente fluida.
El dinero hoy se mueve por múltiples rieles: transferencias, billeteras digitales, pagos QR, incluso blockchain. El reto ya no es crear una única vía, sino integrarse inteligentemente a todas. En países como Brasil, el sistema de pagos instantáneos PIX ha superado en volumen a las transferencias tradicionales, marcando un cambio irreversible.
“Para responder al presente —y anticipar el futuro— la banca necesita entornos modulares, arquitecturas abiertas y APIs que fomenten la colaboración con fintechs y desarrolladores. Solo así se habilita la innovación continua y se asegura la relevancia”, explica el vocero de Frame Banking™, una plataforma diseñada para acompañar este cambio estructural.
“Adoptar múltiples rieles de pago, abrir la arquitectura bancaria y apostar por un sistema flexible y desacoplado no es solo una ventaja competitiva: es una condición de supervivencia. La verdadera transformación digital no puede quedarse en lo visual. Requiere ir al fondo de la operación: a la transacción”, finalizó Pablo Pereyra.